En la producción de ácido sulfúrico, los intercambiadores de calor están continuamente expuestos a ambientes corrosivos de alta temperatura y alta concentración.Los materiales tradicionales como el acero inoxidable y las aleaciones de cobre suelen sufrir una rápida corrosiónEn cambio, la reducción de los costes de mantenimiento de las instalaciones, que se traduce en una vida útil reducida y en frecuentes paradas de mantenimiento.El titanio, especialmente los tubos de grado 2 y grado 12 fabricados según la norma ASTM B338, se ha convertido en el material preferido en muchas plantas ácidas debido a su excepcional resistencia a la corrosión..
El titanio forma una película de óxido densa y estable en su superficie, lo que lo protege contra la corrosión uniforme, las fosas y el agrietamiento por corrosión por esfuerzo, incluso en duras condiciones de ácido sulfúrico.Estos tubos pueden funcionar de forma fiable durante más de una década, reduciendo significativamente la frecuencia de sustitución y los costes de mantenimiento, al tiempo que mejora la estabilidad operativa general y la seguridad de la planta.
Desde el punto de vista de la eficiencia a largo plazo, la reducción del mantenimiento y la fiabilidad, los tubos de intercambiadores de calor de titanio ofrecen ventajas incomparables en la industria de procesamiento de ácido sulfúrico.